Los expertos pueden ofrecer diferentes teorías sobre su origen, pero una cosa está clara: existe el Día de San Valentín porque la gente quiere celebrar el amor. El reconocimiento de tan fuerte emoción desarrolló muchas tradiciones que conocemos hoy como intercambiar cartas de amor, regalar flores y entregar chocolates.

Si bien las cartas o tarjetas y las flores ya son regalos antiguos para el Día de San Valentín, los chocolates se han vuelto populares recientemente en algunos países. Sin embargo, los chocolates ya se usaban como regalo durante el período azteca. Los aztecas creían que la sabiduría y el poder se adquieren al comer el fruto del árbol del cacao, del cual se crean los chocolates. También consideraron que los chocolates tenían cualidades nutritivas, fortificantes y afrodisíacas.

En el siglo XVII, la princesa española María Teresa le dio chocolates a Luis XIV de Francia empacados en un cofre elegantemente adornado como regalo de compromiso. Durante estos años, ya había una locura por el chocolate en la mayoría de las áreas de Francia.

Hoy en día, los regalos de chocolate significan amor, lujuria y placer. Muchos dicen que los chocolates son seductores y sugerentes debido a su gratificante potencia, cremosidad y sedosidad.

Una encuesta de Debra Waterhouse, autora de Por qué las mujeres necesitan chocolate, mostró que el 50 por ciento de las mujeres encuestadas elegiría el chocolate en lugar del sexo y el 22 por ciento de ellas era más probable que eligiera el chocolate para elevar su estado de ánimo.

Dependiendo del gusto del receptor, las personas dan chocolates regulares, oscuros o con leche. Algunos de los obsequios de chocolate favoritos en Internet incluyen fresas cubiertas de chocolate, chocolates hechos a mano, la torre de dulces sorpresas y un juego de fondue caliente para derretir.

Brillando con una llovizna de colores, una fresa cubierta de chocolate se compone de fresas bañadas a mano en chocolate blanco, oscuro o con leche. Mientras tanto, los chocolates hechos a mano tienen muchas variaciones según el paladar del panadero y el receptor. Estos chocolates se colocan en cajas de San Valentín de moda.
La torre de sorpresas dulces consiste en pretzels cubiertos de chocolate blanco, caramelos de chocolate con sabor a cereza y fresas y botones de crema.

La tradición japonesa da un giro diferente a la hora de regalar chocolates. Son las japonesas las que regalan chocolates a los hombres. Aunque, las mujeres reciben regalos de los hombres durante el Día Blanco cada 14 de marzo. Esto se debe a que se alienta a las mujeres a expresar su amor regalando chocolates en el Día de San Valentín. Las mujeres también regalan chocolates a sus amigos varones, hermanos, padres y colegas.

Los chocolates que las mujeres regalan a conocidos, colegas y superiores se llaman ìgiri-chocoî, que literalmente significa chocolate de obligación. Las mujeres se aseguran de dar giri-choco para que los hombres no se sientan excluidos. El precio de un giri-choco oscila entre 200 y 500 yenes.

Para aquellos hombres que aman, las mujeres acompañan sus obsequios de chocolate con otros artículos como ropa, corbatas y gemelos, por nombrar algunos. Estos chocolates se llaman “honmei-choco”, que literalmente significa chocolate ganador potencial. Un honmei-choco es caro comparado con un giri-choco. Estos también pueden ser caseros.

Japón es un conocido país de chocolates. Las estadísticas dicen que los chocolates vendidos durante el Día de San Valentín se vendieron principalmente en Japón. Este país cuenta con tiendas que venden una variedad de chocolates nacionales e importados. Las famosas marcas japonesas de chocolate son Meiji, Morinaga y Glico.

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